Asekita subraya la incapacidad municipal para resolver la zonificación para bañistas y escuelas. Denuncian que este año el concejal de Playas tuvo la gran idea de poner banderas para delimitar las zonas. «Nuestra asociación accedió al correspondiente retrato de prensa y a colocar y quitar las banderas hasta que el servicio de playas se encargara. A día de hoy, el Ayuntamiento no se ha preocupado para que esto se cumpliera y las banderas han quedado abandonadas al no responsabilizarse el Ayuntamiento. Parece que hecha la foto, ya no había nada más que hacer», denuncia.
También critican que se ha colocado el balizamiento a finales de julio en lugares donde nunca se había hecho y está perjudicando enormemente a las escuelas en su actividad diaria. Este año, se ha reducido con las boyas el espacio a la mitad algunas zonas de escuelas. «Está muy bien que pongan a consulta pública los planes de playas, pero si se tiene un poco de sentido común, se habla con las partes afectadas antes de cambiar cosas tan importantes como estas», señalan.
Por otra parte, Asekita se queja de que con el objetivo de controlar las escuelas pirata, este año se les exigió a las escuelas colocar una banderita amarilla para ver quien era legal y quien no. Sin embargo, el listado de escuelas con autorización ningún año está antes de que empiece la temporada y no hay efectivos policiales que hagan revisiones de las escuelas.
La asociación también incide en la regulación del parking de Los Carriles y Punta Paloma ya que asegura que desde el Ayuntamiento se les reiteró que este año estaría controlado y que incluso habría gálibos que se abrirían por la mañana y cerrarían por la noche. «Sorprendentemente los gálibos no están en funcionamiento ni existe regulación en el parking. Las escuelas encuentran cada día que aparcacoches totalmente ilegales están usando la zona de escuelas para aparcar los turismos que llegan. ¿Llamar a la Policía? Lo siento, no tenemos efectivos», denuncia.
Sobre el acondicionamiento de pasarelas, el colectivo ha reiterado al concejal de Playas desde 2020 que había que arreglar las pasarelas a la altura del Chiringuito Agua. «Parece ser que achancar unos clavos para que no vuelvan a pincharse los turistas es la única solución que pueden elucidar», apunta,
Por tanto, ASEKITA, ante todo este panorama de mala gestión, sólo le queda lamentarse de la poca competitividad en la gestión municipal. «El kite no sólo se apoya haciéndose la foto de cara a la galería los días de competición o en Fitur, sino preocupándose diariamente para mantener las mejores condiciones todo el año», concluye.