Con este artículo se inaugura la sección «El carnaval opina», un apartado para todo aquel aficionado que quiera exponer sus experiencias, ideas y opiniones, en definitiva hablar de carnaval. Para ello sólo tienes que ponerte en contacto con la redacción mandando un mail a [email protected]
Escrito por Juanma Lara¿Nunca os habéis parado a pensar en el trabajo y el sacrificio que cuesta sacar una agrupación de carnaval?, pues la respuesta la he vivido yo en primera persona. Para quien se pregunte quien soy, me gustaría presentarme:Mi nombre es Juanma Lara,tengo 29 años y soy de Algeciras. En mis ventinueve años de vida y nueve meses que estuve en el interior de mi madre, he crecido, vivido y estado vinculado a la música, no hay un solo día de mi vida que me haya faltado.Gracias a mis padres que me enseñaron a vivir la música de nuestra tierra como el Rocio, la feria, la navidad y el carnaval, ellos me inculcaron el sentido de cada fiesta y lo importante que es ser participe de la cultura de nuestro pueblo, siempre de una forma desinteresada y sin afán de protagonismo alguno, porque de las tradiciones de un pueblo nace el amor y la historia de nuestra gente.Tras varios años como componente en varias agrupaciones carnavalescas, os puedo decir que de David y Elena he intentado captar la dulzura, de Juana el arte y la defensa de mi pueblo, de José el sentimiento y el conocimiento del cante por el carnaval y de los hermanos Torres la fe, el coraje y las ganas. Estos últimos me dieron la oportunidad de dirigir y afinar una chirigotita callejera que tenían y llevarla a concurso cosechando varias alegrías en tres años que estuve con ellos.Este año decidí emprender mi camino en solitario, tirando de mi gente, mi Fafi, mi Fofo, mi Tello y mi Paco y con la importación impagable de algunos «monstruos del carnaval» como Juana e Imanol Malla pero me encontré con el mayor problema que puede surgir en una agrupación….éramos cinco…y para un cuarteto como que no.Entonces en mi cabeza me llegaban mil preguntas ¿y la gente? ¿y los tenores? ¿y los segundas? ¿y el caja? ¿y el bombo?Tras tirar de nuestras agendas y conseguir reclutar a un par de componentes mas nos dimos cuenta que era misión imposible, una odisea, una utopia sacar esto adelante. El que sabía de carnaval ya estaba fichado y el que no estaba fichado estaba quemado así que comencé a inquietarme, ¿dónde están los que llegan?, ¿dónde están esos chavales de 12 y 13 años que sacaba Manolo «el grande»?, ¿dónde están las escuelas de carnaval que tan bonito quedaban en boca de quienes lo planteaban?, entonces me surgió esta reflexión: ¿Esta el carnavalero en peligro de extinción?Tras todas estas preguntas llegué a la conclusión de que si, que somos una especie de extinción y no hacemos nada para proteger ni salvar esta nuestra especie.
