Es la foto del día, ya que en los últimos días han surgido varias pintadas en diferentes zonas de la ciudad, generando preocupación entre vecinos y autoridades por el impacto negativo que estos actos vandálicos tienen sobre el entorno urbano. Las marcas, localizadas en muros, fachadas y espacios públicos, han sido denunciadas por residentes que alertan del deterioro estético y social que provocan.
Desde el Ayuntamiento se subraya que estas acciones no representan los valores de convivencia y respeto que definen a la comunidad. Fuentes municipales aseguran que no se pasará por alto ningún episodio de este tipo y que se están intensificando los trabajos de limpieza para devolver cuanto antes la normalidad a las zonas afectadas.
Los servicios municipales han comenzado a actuar en los puntos señalados, mientras se refuerzan también las labores de vigilancia con el objetivo de prevenir nuevas pintadas. El consistorio recuerda que el cuidado del espacio público es una tarea colectiva y agradece la colaboración vecinal, que en los últimos días ha sido clave para localizar y comunicar los incidentes.
La intención del Ayuntamiento es mantener las calles limpias y seguras, y continuar trabajando para que el municipio conserve la imagen que sus vecinos desean y merecen.
El mensaje “Feminismo es cáncer” resulta profundamente absurdo porque compara un movimiento social que lucha por la igualdad de derechos y oportunidades con una enfermedad devastadora que causa sufrimiento y muerte. El feminismo no es un ataque, sino una reivindicación de justicia y dignidad para la mitad de la población; ha impulsado avances fundamentales en educación, seguridad, derechos laborales y libertades civiles. Equipararlo con un “cáncer” no solo demuestra una comprensión distorsionada de su propósito, sino que también busca deshumanizar y desacreditar un esfuerzo colectivo que ha mejorado la vida de millones de personas. Es un mensaje vacío, ofensivo y ajeno a cualquier debate serio o constructivo.
















