La concejal de Hacienda del Ayuntamiento, María Manella, destacó que las cuentas municipales incluyen un superávit de 238.827 euros, y que el objetivo de las mismas es el de mantener los actuales niveles de consolidación fiscal, así como financiar proyectos para ampliar y mejorar los equipamientos e infraestructuras del municipio.
Puso especial énfasis en las áreas de gasto de mayor necesidad, con un capítulo de inversiones de 3.391.000 euros y un aumento de los ingresos en un millón de euros respecto al año anterior.
Así, en el capítulo de inversiones destacó las destinadas a mantenimiento de montes públicos, reposición de vías públicas, caminos municipales en zonas rurales, inversiones en infraestructuras hidráulicas (mejorando la red de redistribución, sistemas de aducción, potabilización y reparación de la EDAR de La Marina).
Igualmente, destacó el aumento global del gasto y la inversión en capítulos como los servicios básicos, con una previsión de inversión que crece un 18,33% debido al aumento de la inversión en abastecimiento domiciliario de agua y gestión de residuos urbanos.
Soga al cuello
El PP votó en contra de los presupuestos, poniendo el acento en que la deuda viva del municipio se encuentra cercana a los 39 millones de euros, muy por encima del límite establecido por la ley reguladora de haciendas locales. La edil popular María González espetó que «lo que hacen es negociar otro periodo de carencia hasta 2022», por lo que calificó el alivio financiero defendido por el equipo de Gobierno como «soga al cuello para el próximo que gobierne el Ayuntamiento» y que «como se está gestionando el dinero de la deuda tenerá repercusión en el cumplimiento de la regla de gasto a la finalización».
Asímismo, criticó que se reduzcan partidas fundamentales en cumplimiento de otras no tan necesarias. Así, aseguró que disminuye la inversión en limpieza viaria, alumbrado público, sanidad, pavimentación de vías públicas, protección de la salubridad pública o protección civil; mientras que aumentan otras como festejos, deportes o comunicación. «Primero hay que dar servicios públicos antes de hablar de fiestas», señaló González.
La concejal del PP también alertó del aumento de los impuestos directos en un 6,9% respecto a 2019 y que los municipios de la provincia que más pagan impuestos son El Puerto, Sanlúcar y Tarifa.
Absteción
El concejal de Adelante Tarifa José Francisco Castro se abstuvo afeando la falta de participación en unos presupuestos con «poca cultura democrática» y reinvidicó la necesidad de que se hubieran abordado en un Pleno monográfico.
El concejal de Andalucía por Sí, Francisco José Araujo, por su parte, dio su apoyo a unos presupuestos «ajustados a la realidad del municipio».