IAM/EP La mayoría de las CCAA cumplieron el año pasado el déficit del 1,5% previsto, doce en total, con Extremadura a la cabeza (0,69%) y la Comunidad Valenciana a la cola (3,45%), según los datos hechos públicos por el ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas. La media de todas ellas sin embargo se encuentra por encima del objetivo, en el 1,73%. Las comunidades que se han quedado por encima del déficit del 1,5%, además de la valenciana, son Murcia (3,02%), Andalucía (2,02%), Cataluña (1,96%) y las Islas Baleares (1,83%). El resto ha quedado así: País Vasco 1,39% de déficit, Galicia 1,19%; Asturias 1,04%; Cantabria 1,13%; La Rioja 1,04%; Aragón 1,47%; Castilla-La Mancha 1,53%; Canarias 1,23%; Navarra 1,34%; Extremadura 0,69%; Madrid 1,07%; y Castilla y León 1,4%. El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha destacado este jueves en rueda de prensa el gran esfuerzo realizado por todas las administraciones territoriales el año pasado, aunque ha reconocido que el recorte ha sido mayor en unos casos que en otros y que se abre un escenario nuevo, la gran disparidad del déficit entre autonomías, algo que no había ocurrido en ejercicios anteriores. Montoro ha subrayado que este frenazo del déficit no se hubiera logrado sin la Ley de estabilidad presupuestaria y la vigilancia a la que ha sometido las cuentas regionales. Pero ha descartado por el momento la intervención de las autonomías que no han cumplido el objetivo, primero porque las cifras tienen que ser confirmadas por Eurostat, pero también por el gran esfuerzo realizado y que se va a seguir realizando. Pero Montoro no ha negado que se llegue a ese extremo, porque «los procedimientos están ahí». «La ley se está aplicando y la seguiremos aplicando, ya veremos si hacemos un gran titular de esos que les gustan», ha dicho a los periodistas al ser preguntado. También ha abierto la puerta a flexibilizar el objetivo de déficit de las autonomías, que por el momento sigue siendo el 0,7% y con esta cifra se han realizado todos los presupuestos de las comunidades. Dependerá primero de que Bruselas lo autorice para España. «Si se produjera esa circunstancia, ya lo abordaremos», ha añadido.GRANDES FRENAZOS Cristóbal Montoro ha reconocido el esfuerzo realizado por algunas autonomías para reducir el déficit, aunque se ha resistido a dar nombres porque ha sido un trabajo, ha insistido, colectivo. Ha reconocido que algunos presidentes le habían pedido que hoy destacase de dónde partían y a dónde han llegado y ha admitido que algunos casos son destacables, pero no ha querido individualizarlos. De los datos, destaca el de Castilla-La Mancha, que pasa de un déficit en 2011 del 7,87% al 1,53% del año pasado, 6,3 puntos de ajuste, el mayor de los realizados, seguido por el de Extremadura, que ha dado un frenazo de 4,1 puntos porcentuales en su déficit en un año. Entre las autonomías que también han cumplido el objetivo, destaca igualmente la corrección aplicada en Asturias (del 2,6% en un año) y en Cantabria (2,3%), así como en el País Vasco (1,2%) y Castilla y León (1,1%). Las regiones que han superado el objetivo del 1,5% han rebajado también sus déficit, pero no lo suficiente. Es el caso de la Comunidad Valenciana, que ha reducido la cifra un 1,6%; Murcia, que lo ha hecho en el 1,5%; Andalucía, con una corrección de un año para otro de 1,4%; Islas Baleares, que ha bajado el déficit un 2,3%; y Cataluña, un 2,1% de bajada.ENTIDADES LOCALES El déficit del Estado se compone también del que aportan las entidades locales, que cerraron 2012 con un déficit conjunto del 0,2%. El secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, ha destacado que el ajuste en ellas ha sido del 50%, un esfuerzo también importante de los más de 8.000 ayuntamientos repartidos por todo el país. Beteta ha querido subrayar en concreto los datos de los ayuntamientos mayores, porque de los seis más grandes cinco, ha destacado, han liquidado 2012 con superávit: Madrid, de 915 millones de euros; Barcelona, de 117 millones; Málaga 2,7; Sevilla, 83 millones; y Valencia, 15. La sexta, Zaragoza, tuvo un déficit de 44 millones de euros. El secretario de Estado ha calificado de «vuelco» esta situación y ha destacado especialmente el efecto de la subida del IBI, un esfuerzo pedido a los ciudadanos, ha admitido, que sin embargo ha permitido ingresos de mil millones a los ayuntamientos, «muy importantes para cumplir el objetivo».