Durante los dos meses de verano, la piscina municipal cubierta mantendrá su actividad. El objetivo es que los usuarios no se vean obligados a descender en los niveles alcanzados durante todo un curso. La oferta que se hace para ello es amplia y con adaptaciones horarias lógicas. Así, los menores tendrán oportunidad de seguir en su aprendizaje gracias a los cursos que se impartieron cada mañana. Mientras ellos concentrarán su actividad en las horas principales del día, los usuarios adultos tienen la oportunidad de escoger entre horarios de mañana y de tarde. También aquí la oferta es amplia, desde las clases de Iniciación, hasta las de Perfeccionamiento. Existe también la posibilidad de beneficiarse de un curso de natación terapéutica para mayores de 50 años. Todo forma parte de la oferta para el verano y, además, los bebés también pueden comenzar a familiarizarse con el medio acuático esta temporada. La piscina municipal cubierta ofrece posibilidades a padres y madres para que éstos acudan con los pequeños de tan sólo meses. Recibirán el seguimiento adecuado para que disfruten de una forma diferente con esta actividad. Estos cursos de verano se impartirán dos veces a la semana y sus precios oscilan entre los 16 y los 30 euros.