Prefiero ser un indio
que un importante abogado. (Manolo Chinato y Robe Iniesta)
Lunes, 15 de diciembre.
El día de mi cumpleaños se murió el Robe. Muchas cosas se han dicho y escrito estos días, pero todas las dijo él; así que me quedo con lo mejor que he leído en su nombre «la cólera del amor humano frente a un mundo irracional» y con Manolo Chinato recitando el poema que el miércoles me llevó, una vez más, a bailar a deshora, a dar carpetazo al portátil y a vindicar, hoy con más sentido que nunca, cada una de sus frases.
El día de mi cumpleaños dejé un mensaje en la radio sin poder contener la emoción y visité la Catedral por la noche. Flipé con las dos cosas. Eso de la intensidad, sin remedio ya y sin renuncia, es lo que tiene, que no se elige. Habito con frenesí la luna (A.P.) Celebré con los Ratones, me regalaron mis padres. La providencia es ese manto con el que nos arropan por la noche, puede que distintas manos; a mí siguen siendo las suyas. Luego pasó lo del jueves: Jose, Marta, Cris y Laura. El futuro será una simbiosis, o no será. Y (lo tengo decidido) sólo iré con quien lo crea.
Llovió un poco, salió el sol. Fuimos a la playa primero. Vimos el atardecer mientras ellos se buscaban la boca, ella con un chándal viejo, imposible gitanilla, y él con el mismo de siempre. Al día siguiente volvimos. Caminamos sin zapatos, metimos los pies en el agua, brindamos con dos vermús y aparcamos con tiempo de sobra. Luego subimos a casa.
Mi hija bailó con mi madre, mi padre se tumbó en la hamaca. Hoy he comido con Manu, delicia de hombre, mi hijo; he puesto una lavadora.
El invierno aún no ha empezado y voy a preparar su llegada: Que el lecho sea bien holgado, que haya víveres, leña, silencio, agua tibia, mantas… y que caigan las hojas secas como nutriente en mi tierra.
Ama, ama y ensancha el alma
Quisiera que mi voz fuera tan fuerte
que a veces retumbaran las montañas
y escucharais las mentes social-adormecidas
las palabras de amor de mi garganta.
Abrid los brazos, la mente y repartíos
que sólo os enseñaron el odio y la avaricia,
yo quiero que todos como hermanos
repartamos amores, lágrimas y sonrisas.
De pequeño me impusieron las costumbres
me educaron para hombre adinerado
pero ahora prefiero ser un indio
que un importante abogado.
Hay que dejar el camino social alquitranado
porque en él se nos quedan pegadas las pezuñas
hay que volar libre al sol y al viento
repartiendo el amor que tengas dentro.
Manolo Chinato letra
Roberto Iniesta Música
















Un comentario
Gracias María 🙏🏻. Y feliz cumpleaños!
Besos, Patricia.