El presidente de los empresarios españoles Juan Rosell que pese haber reconocido, no obstante, que este planteamiento tiene pocas posibilidades de ver la luz, ya que los trabajadores indefinidos no lo aceptarían, deja caer cual globo sonda generador de bronca entre los que dan trabajo y los que lo reciben, buscando el “divide y vencerás”, que eso si sobre el papel queda de lo más bonito y solidario. Se trata de que el presidente de la CEOE, Juan Rosell, ha abogado este lunes por poner el contador a cero en contratación para combatir la dualidad del mercado laboral, retirando a los contratos indefinidos algunos de sus «privilegios» e incrementándolos para los temporales, que, según ha destacado, son el 90% de los contratos que se hacen «y gracias». «¿Estarían dispuestos los trabajadores fijos a aceptar estas nuevas condiciones en beneficio de los que tienen contratos temporales nuevos? Sería un experimento importante, pero no creo que lo aceptaran. Creo que esto es Alicia en el país de las maravillas», ha admitido. Sin embargo, en su opinión, quitar a los fijos esos «privilegios, por llamarlos de alguna manera» -han sido sus palabras textuales- daría lugar a un mercado laboral sin diferencias entre indefinidos y temporales, en contraste con el mercado de trabajo «absolutamente dualizado» que presenta España en estos momentos.