En los vanos o huecos que resulten de mayor tamaño se incorporarán piedras acarreadas procedentes del Castillo.
La retirada de la vegetación intrusiva de los lienzos de muralla y Castillo lleva así emparejda el sellado posterior de los huecos con el citado mortero de cal y arena, o la piedra en determinados casos para contrarestar el enraizamiento de semillas que se depositan en la zona ya sea arrastradas por el viento o con la acción de las aves.
Lo explican así a pie de intervención el arqueólgo municipal, Alejandro Pérez-Malumbres y el biólogo y gerente de la empresa especializada, COINPLA, Alfonso Pacheco.
La intervención cuenta con los permisos de la comisión de Patrimonio de la delegación territorial de Cultura. El concejal delegado del área, Francisco Terán señalaba hoy que supone un paso en firme para la prevención del deterioro y el cuidado de un patrominio de todos.
