Lunes, 1 de diciembre.
Definición de Dios: mirarnos a los ojos. Definición de amistad: mirarnos a los ojos. Definición de aMor: mirarnos a los ojos. En silencio pronunciar «Te perdono, y me perdono. Te respeto, y me respeto. Me sostienes, y te sostengo». Cuando todo se derrumbe (y lo hará) o te veas en lo más alto (y te verás), vuelve a mirar a los ojos. Apequéñate, entra en contacto, humanízate, rueda… La puja por tener razón dejó la subasta desierta y en medio del latido común se abrió paso la humildad con la intuición de la mano. Isabel descorchó el vino, lavó las copas. Pronunció el brindis -mariquita, libélula, lo blando…, pensé yo -. Se inauguró la alfombra. Comprendí que la sencillez de corazón es ese «arte suntuoso de reducirse a un punto, ni grande ni pequeño, de modo que cada cosa en el Universo sea como es en realidad: de tamaño inconmensurable» (Chesterton), y que el prodigio de sentir la bondad esencial requiere un proceso de castración mental previa.
Y sobre ese punto pivotamos, ofreciendo peso, sensando el del otro. Pintamos un nuevo camino, con forma y color diferente, que transcurre junto al de hoy, con más inocencia, con más frescura. Con más danza y menos soberbia, y menos orgullo que enjuicia e impide el aprendizaje. «El orgullo no solo es enemigo de la instucción; es enemigo de la diversión y de la alegría».
Aprendiendo a ser humildes supimos lo buenos que somos, dibujamos el Oasis del norte con el arte de Castaño. Hubo mares, sol, horizonte, formas curvas, dentro y fuera, pegotes de colores, bodegón. Y antes de la comida, calor humano en el centro, decidimos no perdernos, invocamos la Calma y nos miramos de nuevo.
Annalena Tonelli
Nuestra tarea en la tierra es hacer vivir. (…) La vida es esperar siempre, esperar contra toda esperanza, echar a la espalda nuestras miserias, no mirar las miserias de los demás, creer que DIOS está presente y que EL es un DIOS de amor. Nada nos turbe y siempre adelante con DIOS.
La vida tiene sentido sólo si se ama. Nada tiene sentido fuera del amor. Mi vida ha conocido muchos y muchos peligros, he arriesgado la muerte muchas, muchas veces. Por años he estado en medio de la guerra. He experimentado en la carne de los míos, de los que amaba, y por tanto en mi carne, la maldad del hombre, su perversidad, su crueldad, su iniquidad. Y he salido con una convicción inquebrantable que lo que cuenta es sólo amar. Incluso si Dios no existiese, sólo el amor tiene sentido, sólo el amor libera al hombre de todo lo que lo hace esclavo; en particular sólo el amor hace respirar, crecer, florecer; sólo el amor hace que ya no tengamos temor de nada; que pongamos la otra mejilla aún no herida a la burla y a los golpes de quien golpea porque no sabe lo que hace; que arriesgumos la vida por nuestros amigos; que todo lo creemos, que todo lo soportamos, que todo lo esperamos…
Mis nómadas del desierto me han enseñado a hacer todo, a comenzar todo, a obrar todo en nombre de DIOS. BISMILLAHI RAHMANI RAHIM… En nombre de DIOS Omnipotente y Misericordioso. Uno se levanta en nombre de DIOS, se lava, limpia la casa, trabaja, cose, come, sigue trabajando, estudia, habla, hace mil cosas cada día, y, finalmente, se duerme: TODO en el nombre de DIOS. La costumbre del nombre de DIOS repetido incesantemente ha transformado para siempre mi vida. Doy GRACIAS a mis nómadas del desierto que me lo han enseñado.
La fe sin AMOR es inútil. Después de todo, mi religión cristiana no tiene muchos y muchos mandamientos, sino uno solo, que no sirve construir catedrales o mezquitas, ni ceremonias ni peregrinaciones… Luigi Pintor, que se llamaba ateo, escribió un día que no hay en la vida algo más importante que hacer que inclinarse para que otro, abrazándose a tu cuello, pueda levantarse. Así me sucede a mí. Al arrodillarme para que se abracen a mi cuello, ellos puedan levantarse y retomar el camino o incluso caminar donde nunca habían caminado. Así yo encuentro paz, y la certeza de que TODO es GRACIA.
Quisiera añadir que los pequeños, los que no tienen voz, los que no cuentan nada a los ojos del mundo, pero mucho a los ojos de DIOS, sus predilectos, tienen necesidad de nosotros, y nosotros debemos estar con ellos y para ellos y no importa nada si nuestra acción es como una gota de agua en el océano. Jesucristo nunca ha hablado de resultados. EL ha hablado sólo de amarnos, de lavarnos los pies unos a otros, de perdonarnos siempre… Los pobres nos esperan. Las formas de servicio son infinitas y dejadas a la imaginación de cada uno de nosotros. No esperemos ser instruidos en el campo del servicio. Inventemos… y viviremos nuevos cielos y nueva tierra cada día de nuestra vida.
