En los últimos días han aparecido en el fondo marino y en la orilla de la zona mediterránea de la Isla de Tarifa —frente a Playa Chica— numerosos papeles y almohadillas absorbentes de hidrocarburos procedentes del operativo de limpieza del barco hundido frente a la costa.
Según fuentes locales y buceadores que frecuentan la zona, las almohadillas se emplearon dentro de las barreras anticontaminación para retirar el gasoil vertido tras el accidente marítimo. Sin embargo, muchas de ellas han acabado escapando al entorno natural o no fueron recogidas tras las labores de contención.
“Los buzos aseguran que en el fondo marino hay todavía muchas más”, señalan testigos que han documentado los hallazgos en las inmediaciones de las rocas y en la propia línea de costa.
Los materiales localizados son similares a las almohadillas absorbentes de aceite y líquidos industriales utilizadas en tareas de control de derrames, como las comercializadas en plataformas de venta en línea —por ejemplo, modelos de 25 x 33 centímetros fabricados para absorber hidrocarburos de forma rápida—.
La aparición de estos residuos ha generado indignación entre vecinos y colectivos ambientales, que se preguntan cómo es posible que un puerto que opera con cuatro ferris diarios y se encuentra junto a dos parques naturales —el del Estrecho y Los Alcornocales— no disponga de un sistema más eficaz para prevenir y contener este tipo de vertidos.
Las autoridades portuarias y medioambientales todavía no han emitido un comunicado oficial sobre la situación ni sobre las posibles actuaciones de limpieza complementarias que se realizarán en la zona.