El sector de Educación de CSIF Cádiz lamenta que este inicio de curso en Educación Primaria en la provincia de Cádiz evidencie la dejadez de la administración ante el aumento del alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo (NEAE) en los últimos años.
Según los datos con cuenta el sindicato, en la provincia, desde el año 2016, este alumnado se incrementó en torno a un 35,5% (de 9.000 a 12.200), mientras que el profesorado especialista (Pedagogía Terapéutica y Audición y Lenguaje) solo creció en un 11%, pasando de 853 a 951 docentes. Esta situación, evidentemente, impide una atención adecuada a este alumnado,
provoca trastornos en la organización de los horarios lectivos y acaba perjudicando en general a todo el alumnado del centro escolar, no solo a quienes requieren un apoyo educativo especial.
Como señalan desde CSIF, “el crecimiento de dicho alumnado respecto al aumento de los profesionales específicos para atenderlo no va acompasado, lo que pone en riesgo una adecuada atención a la diversidad, así como una atención de
calidad al conjunto de los escolares de los centros educativos públicos”.
A nivel autonómico, ya que la situación es prácticamente igual en todas las provincias, CSIF Educación reitera “la necesidad de un pacto de plantillas en la escuela pública y ha instado a la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional a bajar la cifra de alumnos y alumnas por clase aprovechando la bajada de la natalidad, en lugar de suprimir
unidades en la escuela pública, que es la única universal, inclusiva y que garantiza la equidad”. Para la central sindical, “la bajada de natalidad no ha de traducirse en supresión de unidades y en elevar el número de alumnos por aula en aquellas que se mantienen, cuando además el alumnado con NEAE no hace más que crecer, sino en aprovecharla como una oportunidad para hacer grupos que sean menos numerosos y con una atención más personalizada”.
Igualmente, reclaman una mayor transparencia sobre la aplicación de los fondos europeos que vienen destinados a la escuela pública andaluza, al tiempo que avisa de que “vigilará que los recursos humanos que se han puesto en carga en este curso
escolar con este tipo de fondos para atención a la diversidad, se mantengan estructuralmente en el sistema educativo público, porque ni siquiera con los que hay es suficiente”.
Los datos de la OCDE confirman el grave diagnóstico de CSIF sobre la situación de la educación pública en el conjunto de España, por lo que la central sindical reitera su exigencia al nuevo Gobierno central de impulsar un pacto de Estado que mejore la educación pública y aporte estabilidad al sistema educativo. Este pacto de Estado debería favorecer un aumento de la inversión educativa en centros públicos, reducción de ratios, aumento de las plantillas y una estabilidad legislativa para evitar situaciones como la paralización de la Ebau o las diferencias entre comunidades autónomas en los currículos.