Esta mañana hemos recibido en la redacción fotos frente al Arte y Vida que atestigua la presencia de la carabela Portuguesa una medusa conocida por su picadura.
¿Qué son las carabelas portuguesas y qué hacer si una te pica?
El aumento de medusas y otros organismos como la llamada carabela portuguesa se debe a la contaminación, calentamiento del agua y escasez de depredadores.
A pesar de las molestias que causan con sus tentáculos tóxicos, las medusas son esenciales en la cadena alimentaria, siendo presas de especies superiores como tortugas marinas, crustáceos, corales y ciertos peces, que ayudan a regular su número.
Paralelamente, la reciente aparición de varios ejemplares de carabelas portuguesas en diversos puntos de la Península como Asturias, Cantabria y Guipúzcoa también ha disparado las alertas de los equipos de salvamento.
Esta situación preocupa a los bañistas y a las autoridades locales, ya que las picaduras de estos organismos marinos, a menudo confundidos con medusas, son cada vez más comunes debido a la subida progresiva de la temperatura del mar.
Carabela portuguesa
Su nombre científico es Physalia physalis, pero también se le conoce como carabela portuguesa, fragata portuguesa o falsa medusa.
Las carabelas portuguesas se distribuyen en todas las aguas cálidas del planeta, especialmente en áreas tropicales y subtropicales de los océanos Pacífico e Índico. También habitan en la corriente del Golfo Atlántico y ocasionalmente se aventuran en el Mediterráneo. Los expertos atribuyen su llegada a las costas españolas a las dinámicas de los vientos marinos.
CÓMO IDENTIFICAR UNA CARABELA PORTUGUESA
Aunque la apariencia de la carabela portuguesa es similar a la de una medusa, técnicamente no lo es. Es, de hecho, un conglomerado de organismos que cooperan como una colonia para sobrevivir.
Juntos, forman un hidrozoo de plancton gelatinoso, incapaz de subsistir de manera independiente. Su nombre científico es Physalia physalis, pero también se le conoce como carabela portuguesa, fragata portuguesa o falsa medusa.
Posee una forma distintiva de globo o vejiga llena de gas que puede medir hasta 30 centímetros de diámetro. Además, presenta largos tentáculos, de hasta 50 metros de longitud, que se reconocen fácilmente por su color azul o púrpura.
Este ser viscoso recorre grandes distancias impulsado por el viento gracias a su neumatóforo, una especie de flotador de unos quince centímetros que le sirve de vela y del que cuelgan largos tentáculos urticantes.
QUÉ HACER SI TE PICA UNA CARABELA PORTUGUESA
No solo son peligrosas para los habitantes del mar; también lo son para los humanos. La picadura de una carabela portuguesa puede resultar mortal para un niño o incluso para un adulto con salud comprometida. Para una persona de peso y salud normal, la picadura no debería ser extremadamente dañina, y sus efectos normalmente desaparecerán en unas pocas horas.
Los síntomas más comunes de una picadura incluyen escozor y picor en la zona afectada. Sin embargo, la picadura también puede provocar dolores intensos, náuseas, fiebre, vómitos e incluso la muerte. Su veneno permanece activo incluso después de que el ejemplar ha sido retirado de la arena, por lo que es crucial no tocarlo.
Turritopsis dohrnii
Frente a una picadura, es fundamental actuar rápidamente para neutralizar el veneno y retirar todos los restos de tentáculos de la piel. Se puede intentar lavar la zona con alcohol o con agua salada. No se recomienda usar agua dulce, ya que intensifica los efectos. Tampoco es conveniente usar vinagre, a diferencia de lo que se hace con la medusa común. Además, se aconseja aplicar agua caliente y una crema con cortisona después de la limpieza.
Ante todo, es vital estar informados y ser conscientes de la presencia de estos organismos en nuestras costas. La mejor defensa es siempre la prevención. Así, podemos disfrutar de las playas y el mar, respetando la biodiversidad que nos rodea.