El sector alerta de pérdidas irreparables si no se alcanza pronto un acuerdo
El sector almadrabero de la provincia de Cádiz atraviesa un momento crítico debido a la huelga indefinida de los inspectores de pesca, una situación que califican como “insoportable”. Representantes del sector han hecho un llamamiento urgente al Gobierno para que alcance un acuerdo con los trabajadores en huelga y evite que la temporada se vea gravemente afectada.
Las almadrabas ubicadas en Conil, Barbate, Zahara y Tarifa se han visto directamente perjudicadas. Según informan, en los últimos días se vieron obligadas a cancelar una levantá de atunes ante la ausencia de inspectores, e incluso han tenido que esperar hasta cinco horas en el mar para poder comenzar la faena por falta de personal de inspección.
“Nos encontramos en plena temporada, con condiciones climáticas óptimas para pescar, y sin embargo no podemos operar con normalidad”, lamentan desde el sector. La incertidumbre que genera la huelga impide una planificación adecuada del trabajo, ya que los servicios mínimos establecidos no cubren las necesidades reales de cada instalación o bien no se sabe con certeza cuándo estarán disponibles.
Los representantes de las almadrabas insisten en que no han querido involucrarse en el conflicto hasta ahora, pero advierten que la situación ha alcanzado un punto límite. “Si esto continúa, podríamos perder una parte considerable de la campaña, lo que supondría un duro golpe para más de 500 empleos directos y alrededor de 6.000 puestos de trabajo indirectos que dependen de esta actividad en Cádiz”, han subrayado.
Un comentario
Toca demanda judicial contra el Estado por daños y perjuicios, esto tiene que ser solucionado si no toca pedir responsabilidad económica.