El asunto se trató en el Consejo de Pesca de diciembre, donde este año aparte del reglamento sobre los Totales Admisibles de Capturas y cuotas en el Atlántico y el Mar del Norte, se cerró un acuerdo sobre las aguas profundas (2021-2022) y el plan plurianual para los recursos demersales en el Mediterráneo occidental.
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, opinó al término de la reunión en rueda de prensa que el resultado de las negociaciones es «satisfactorio» para España, al combinar la sostenibilidad pesquera y la rentabilidad socioeconómica de la flota.
La negociación ha terminado sin cambios en la propuesta de Totales Admisibles de Capturas para 2021-2022, que supone un recorte del 20,5 % en la cuota del besugo para el bienio 2021-2022 en el caladero en el que faenan los barcos del Estrecho de Gibraltar.
Brexit
Como consecuencia del Brexit, en la negociación de este Consejo se dejaron aparte 119 especies pesqueras de gestión compartida con el Reino Unido, a la espera de que concluyan las negociaciones y el eventual acuerdo en materia de pesca.
Sin embargo, se decidieron las condiciones para permitir que los buques europeos sigan faenando a partir del 1 de enero.
La solución encontrada es permitir que esos barcos puedan disponer en el primer trimestre de 2021 de un mínimo del 25 % de los TAC establecidos para el año 2020 de las poblaciones compartidas.
En algunas de las especies, como la caballa, la bacaladilla y el jurel, se aumentará hasta al 65 % del TAC durante esos tres meses, como pedía España.
También se ha incluido el mecanismo de intercambio de cuotas para atender la obligación de desembarque en las pesquerías en las que España tiene cuota cero.