«Un verdadero problema para los ciudadanos que no quieren emigrar a otras ciudades.
Como todo, en este loco mundo en el que vivimos, la vivienda y más en los lugares que normalmente son destinos turísticos, se ha disparado en valor económico, poco asequible para la gran mayoría. Pero creo que hay solución a este problema y caben en los terrenos urbanos construcciones de todo tipo, sobre todo asequibles para el ciudadano. Lo único es que tenemos que encontrar a las empresas adecuadas que tienen unos márgenes de ganancias normales y no subidas en la burbuja inmobiliaria. Tarifa tiene una empresa que posiblemente pudiera iniciar estás construcciones, además es una empresa adjunta al ayuntamiento. Lo único que falta es la voluntad. La voluntad sobre todo de querer construir viviendas para ciudadanos y no hacer de cada construcción nueva un completo o conjunto de apartamentos de alquiler, sumisos a la explotación empresarial turística. No es de extrañar que el metro cuadrado esté en esos valores y posiblemente el próximo año incluso más. Queda trabajo por realizar para que aquellos grupos políticos que prometían vivienda para los ciudadanos se pongan manos a la obra y hagan realidad su programa electoral».