«Una vivienda es una vivienda, no una habitación de hotel, lo dicen todas las escrituras de propiedad y legalmente ese así, lo que pasa es que en España , que en más de 40 años se ha convertido en potencia mundial turística, -pseudoindustria que da trabajo lo más 4 meses al año y el resto derecho a cobrar el paro o a ser “fijo discontinuo” que no da “ni pa pipas”- todo hijo de vecino se ha convertido en hostelero aunque sea cobrando en dinero negro esta actividad no declarada (en gran número de casos). Resultado: los habitantes de ciudades con zonas turísticas o reconvertibles en enjambres de pisos de alquiler por días o temporadas, ya no pueden vivir en donde nacieron o de donde son sus familias porque esa actividad mercantil vecinal o no ( muchos hoteles se han apuntado a la moda de forrarse con la vivienda reconvertida a habitación de hotel encauzando dicho negocio en sus balances comerciales), ha disparado los precios de la vivienda y los expulsan de sus propias ciudades. Un ejemplo de los muchos en España: Tarifa, ¿regulamos, controlamos o prohibimos?, no te pases que el primo de mi tío que tiene mucha mano o quizás pertenece a un partido vive de eso (esto en toda España, ese gran hotel mundial); no nos quejemos pues si nuestros hijos no tienen para pagarse un piso a precio de millonarios, los culpables somos todos y el negocio sigue por muchos problemas que nos esté creando».