El gobierno local ya ha pedido autorización administrativa a la Demarcación de Carreteras del Ministerio de Fomento para la realización del carril bici que recorrerá el municipio en paralelo a la nacional 340.
El proyecto se realizará en distintas fases, la primera cubrirá los más de dos kilómetros y medio que distan desde la salida de la ciudad hasta la señalización de entrada al Santuario, en el punto kilómetro 83.
Varios son los criterios y argumentos que mueven al gobierno tarifeño a la realización de un carril peatonal y para bicicletas a lo largo de la Nacional 340. La promoción turística, potenciando el deporte y los espacios naturales, es una de ellas. Otra pasa por la seguridad vial en épocas especialmente claves como el verano, cuando el número de vehículos y el tránsito de personas se hace incompatible.
“El impacto socioeconómico de esta actuación es de gran importancia, debido a que este tramo de carretera es el que concentra a la mayoría de cámpings, hoteles, bares y restaurantes de la zona de costa de Tarifa”. El alcalde de Tarifa ha añadido también que esta actuación “puede ser un revulsivo importante para el sector que verá cómo el acceso y la comunicación con la localidad será mayor, ya que son cada vez más los deportistas que podrán disfrutar de esta alternativa”.
El flujo de peatones y ciclistas es muy numeroso en todas las épocas del año, pero especialmente en la época estival. “La presencia de población joven que evita conducir supone un riesgo que se eliminaría con la construcción de este camino peatonal hasta la localidad”.
La construcción del carril-bici a lo largo del municipio, desde la localidad, concretamente desde la finalización del paseo marítimo de la playa de Los Lances hasta la entrada a Valdevaqueros, es un proyecto ambicioso. Tanto es así que se desarrollará en distintas fases. El primero de los tramos, desde la salida de la localidad en dirección a la señal de entrada al Santuario, podría estar listo para el verano próximo, al menos ese es el objetivo del equipo de gobierno. Serían 2750 metros lineales en zona de servidumbre del trazado de la carretera, sin afección medioambiental.
Además, según la memoria de actuación redactada por los técnicos municipales, la actuación prevista “consiste básicamente en la construcción de un carril de anchura variable, entre 2 y 3 metros delimitados por los elementos de balizamiento y protección exigibles”.
El alcalde apuntaba hoy a otra ventaja que se desprende de la consecución de este carril peatonal y de uso deportivo. Y es que, quedarían resueltos los problemas que cada año hay que afrontar con el transcurso de la Cabalgata en materia de seguridad.
La separación entre el tránsito de vehículos propiamente y los peatones y deportistas supone una puesta en valor de los recursos naturales y una solución alternativa y clara en materia de seguridad vial y protección. El gobierno local entiende que la obra, que tiene como objetivo la citada mejora de la seguridad vial, presta un servicio de interés general y es compatible con la normativa de aplicación.