TCAM-COMARCA/REDACCiÓN
El Divina Providencia, un marisquero de La Línea, ha terminado retirándose de las aguas de la bahía de Algeciras que las autoridades del Peñón reclaman como propias, tras sufrir el acoso de varias naves de la Policía Gibraltareña, a pesar de la protección ofrecida por la Guardia Civil.
El pesquero, perteneciente a la flota de la Cofradía de Pescadores de La Línea, es un marisquero que utiliza el arte del rastro en aguas cercanas al aeropuerto de Gibraltar. Con el objetivo de faenar en su caladero habitual, ya intentó trabajar la pasada medianoche, aunque entonces la Guardia Civil le conminó a que regresara a puerto, ya que los barcos de rastro tienen una limitación horaria que les impide faenar antes de las 5.00 horas.
Pasada esta hora, sobre las 7.00, el pesquero salió de La Atunara, escoltado por la Guardia Civil. A los pocos minutos, tres embarcaciones de la Policía de Gibraltar se dirigieron hacia él con la intención de impedirle que pescara. La Guardia Civil trató de mediar para garantizar la pesca, lo que ha producido momentos de tensión con las patrulleras gibraltareñas.
El patrón del marisquero, Francisco Gómez, confirma la actitud de las autoridades de la colonia británica. «Me han dicho que me vaya, que aquí no puedo pescar porque son aguas inglesas, pero yo no les hago caso». «Cuando voy a calar se ponen delante de mí. La Guardia Civil trata de impedírselo, pero nada. Lo peor de todo es que, con las maniobras que hacen, puede haber algún golpe”, de hecho Gómez confirma que ha habido hasta roces entre los cascos de las embarcaciones.
Tras los primeros incidentes, el patrón mayor de la cofradía de La Línea, Leoncio Fernández, ha llegado también a la zona con su embarcación, y ha instado a las patrulleras de la Policía de Gibraltar a que dejaran faenar al pesquero. Debido al acoso sufrido por el «Divina Providencia», el barco linense ha tenido que terminar abandonando la zona cuando no había podido completar su faena.
En los incidentes se han visto implicados hasta cuatro embarcaciones de la Policía de Gibraltar y seis de la Guardia Civil. La Royal Navy se ha mantenido expectante pero sin intervenir. Esto ha sido otro capítulo más de la situación de tensión que se vive en los últimos días en la Bahía como consecuencia de la prohibición de las autoridades gibraltareñas, y se suma a los que protagonizaron en la madrugada del jueves y el viernes los pesqueros de la flota de Algeciras.
Entretanto, las cofradías de ambas localidades de la comarca han pospuesto hasta esta tarde la formación de un grupo de trabajo que, a partir de hoy, buscará las fórmulas que permitan encauzar una negociación con los técnicos designados por Gibraltar, con el objetivo de alcanzar un acuerdo que ponga fin al conflicto suscitado hace tres meses y en el que se ven afectados 53 barcos de la flota de La Línea y 6 de Algeciras, lo que representa el sustento de más de 200 familias.