IAM/EP
Los participantes se han concentrado a las puertas del salón, vigilado por un despliegue de los Mossos d’Esquadra, ataviados con carteles y camisetas en contra de los desahucios, y cuando Rajoy ha pasado por delante durante su visita le han abucheado, pitado y han gritado: «Rajoy dimisión» y «Culpable».
La portavoz de la PAH, Ada Colau, en declaraciones a los periodistas, ha explicado que con esta acción en la que todos los participantes llevaban un marco de cartón simulando una pantalla de plasma en alusión a las ruedas de prensa del presidente, ha informado de que se trata de la «clausura a la campaña de escraches realizada durante la tramitación de la Iniciativa Legislativa Popular (ILP)».
Sin embargo, ha advertido de que la PAH ampliará «las campañas de desobediencia civil» para hacer efectivos el derecho a la vivienda y a una segunda oportunidad, y que se reservan la posibilidad de volver a hacer escraches más adelante.
Ha lamentado que el Gobierno central no ha querido escuchar a la ILP impulsada por la PAH, «aprobando finalmente una ley que antes de empezar ya es una ley fallida e inútil que no va a solucionar el tema de los desahucios».
PANTALLAS DE PLASMA
Ha explicado que la campaña simulando llevar pantallas de plasma emulando como el presidente «parece que entiende la democracia», ya que da las ruedas de prensa a través de pantallas de plasma.
Asimismo, ha criticado que Rajoy dé lecciones de democracia «cuando acusa a los defensores de los derechos humanos y a los ciudadanos que se movilizan deforma legítima de criminales y terroristas».
«En cambio, se permiten el lujo de darle la espalda a un clamor popular, a un millón y medio de firmas, a una movilización sin precedentes, y a miles las familias que sufren el acoso de las entidades financieras».
En la protesta, los participantes han lanzado las tradicionales consignas de la PAH como «Sí se puede, pero no nos dejan», «No nos representan» y «Qué pasa, qué pasa, que no tenemos casa».