ES LA FOTO DEL DÍA: Una calle estrecha, adoquinada, iluminada por faroles, y en el centro una mesa larga, compartida, de septiembre. Tarifa demuestra lo «RICO» de su gastronomía de toda la vida que no solo alimenta, sino que también reúne, emociona y merece un lugar destacado en la memoria colectiva, igual que ocurre en otros rincones con tanta tradición como Sanlúcar.
El encuentro, celebrado a pie de calle, con plazas completas y todo reservado, fue un homenaje a septiembre, en agosto sería imposible, al sabor auténtico de los bares de siempre. Platos sencillos, vinos compartidos y la alegría de un público que convierte la cena en una fiesta.
Porque en Tarifa, la cocina no es moda pasajera: es historia, raíces y hospitalidad. Cada tapa, cada receta que se sirve en sus bares y tabernas forma parte de un patrimonio que no debe quedarse en la sombra, Tarifa es Destino Gastronómico y habría que gritarlo a los dos vientos….