TCAM/EP
Gibraltar pidió su acceso antes de 2001, cuando la UEFA comenzó a regirse por una norma según la cual se aceptan solo países que hayan sido reconocidos por la ONU.
Platini admite que la idea de las múltiples sedes es ‘un poco loca’
El presidente de la UEFA, Michel Platini, afirmó hoy que la UEFA no tiene más remedio que aceptar a la Asociación de Fútbol de Gibraltar (GFA) como miembro pleno del organismo porque así les obliga el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS).
«Estamos obligados a integrar a Gibraltar porque así nos lo pide el TAS. Es por ello que tendremos que pedirle al Congreso que acepte la decisión», afirmó Platini en un encuentro con periodistas en la sede del organismo rector del fútbol europeo. El presidente explicó que desde 2001 la UEFA se rige por una norma que establece que sólo se aceptarán como miembros plenos de la entidad los países que sean reconocidos como Estados miembros de la ONU. «Es por eso que no tratamos el tema de Kosovo o de Cataluña» -especificó- «sin embargo, Gibraltar pidió su entrada antes del 2001, con lo que la norma no se aplica». Platini recordó que este tema ya se trató en anteriores Congresos de la UEFA y que el ingreso de Gibraltar fue rechazado porque así lo había solicitado el Consejo Ejecutivo. «Pero ahora tenemos una resolución del TAS que nos obliga a recomendar lo contrario, y así deberemos actuar», agregó. El Comité Ejecutivo de la UEFA acordó el pasado día 1 en San Petersburgo (Rusia) admitir a la Federación de Fútbol de Gibraltar como miembro provisional de este organismo, aunque la admisión como miembro de pleno derecho no se tomará hasta el XXXVII Congreso Ordinario, el próximo mayo en Londres. La decisión del Ejecutivo de la UEFA es consecuencia de la resolución del TAS del 18 de agosto de 2011, en la que el tribunal afirmó que la Asociación de Fútbol de Gibraltar (GFA) «tiene derecho a ser miembro pleno de la UEFA y que ésta tomará todas las medidas necesarias para admitirla sin retraso». La asociación gibraltareña de fútbol pidió su admisión como miembro de la FIFA en 1997, pero 2007 el Congreso de la UEFA lo rechazó. Tanto el Consejo Superior de Deportes de España (CSD), como la Federación Española de Fútbol (RFEF) se oponen al ingreso de la GFA en la UEFA, una posición que cuenta con el firme apoyo del gobierno español.