Desde hace ya unas semanas, se puede observar desde el exterior de la Lonja Pesquera de Tarifa cómo unos preciosos gráficos traslucidos decoran las ventanas de forma que preserva la privacidad del trabajo en las instalaciones a la vez que propician una apropiada decoración con motivos propios de la pesca en el muelle pesquero de Tarifa.
Ya son muchos los visitantes de la Ciudad de Tarifa y la propia propia población local, quienes se acercan motivados a curiosear las nuevas imágenes que ofrecen los ventanales de la Lonja. Los motivos elegidos de estos trabajos en vinilo que plasman diversas escenas sobre la actividad de los hombres de la mar tarifeña y sus familias.
La composición contiene seis imágenes diferentes de la vida cotidiana del puerto
La primera figura muestra el entorno natural de las aguas del Estrecho de Gibraltar vistas de desde el Océano Atlántico hacia el Mar Mediterráneo donde es visible la costa africana y enfrente la siluetea del Puerto de Tarifa, su faro y la presencia de los aerogeneradores que inspiran la presencia perenne de los vientos. En el cruce de caminos de lasa aguas el transito de nuestra especie más apreciada, el atún rojo rojo, que en Tarifa se pesca todo el año, siendo uno de los pocos lugares del mundo con capturas de población sedentaria.
La segunda imagen evoca el trabajo en puerto con la reparación de las redes de cerco. En el Puerto de Tarifa esta es una de las artes de pesca que se emplea sobre todo para la pesca de la sardina y de la la alacha en aguas más cercanas ya al Puerto de Algeciras. Aunque también con cerco se captura la gallineta y la japuta o palometa.
En la Lonja de Tarifa no nos hemos querido olvidar de todas las familias que componen nuestra cofradía de pescadores, más de 300, y que son encabezadas por madres, esposas, hermanas e hijas que aguardan cada día el regreso de los marineros. Son un componente más de la labor diaria de la lonja y clave en la sostenibilidad de este medio de vida patente en la ciudad desde hace siglos.
En nuestro puerto de Tarifa se dan tres tipos de embarcaciones pesqueras según el arte que se emplea, de arte menor, de cerco y de palangre de fondo o piedra. En principio no es fácil diferenciarlos pero una vista por los muelles y la observación de los barcos ofrece la oportunidad de distinguir las artes en su interior. El atún rojo rojo se suele pescar con artes menores, aunque para capturas más de piezas más grandes cuya navegación es más profunda se emplea la pesca con palangre con la que también se captura el Besugo de la Pinta o Pez Voraz del Estrecho.
La imagen de la faena pesquera en la banda del barco, muestra el esfuerza y dedicación de la captura con artes tradicionales, donde la simple linea de tanza con el reclamo de la carnada sirve de reclamo para cobrar las pizas de nuestro pescado mas cotizado, el atun rojo rojo de Tarifa, criado de foma salvaje y capturado de forma sostenible por personas que aman
La última de la imágenes colocada en las cristalera muestra la descarga de la captura de atún del día seguida de las tareas propias del trabajo ya en la lonja, donde las piezas se calibran y se distribuyen para su entrega sobre pedido o para la venta en subasta. El atún sigue un proceso de trazabilidad que garantiza los pasos seguidos desde su captura en el barco como por todos los lugares y establecimientos por los que pasa la pieza, entera o ronqueada, hasta llegar al detallista final.