Giro del Ministerio del Interior con el atentado yihadista perpetrado en Algeciras en enero de 2023. Pese a las reticencias mostradas por el departamento dirigido por Fernando Grande-Marlaska con la denominación terrorista del ataque en el que Yassine Kanjaa acabó con la vida de un sacristán e hirió gravemente a otro sacerdote, el titular ha zanjado esta cuestión en una carta publicada hace unos días en el Balance del Terrorismo en España 2023, elaborado por el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo, en la que hace una mención especial a las víctimas fallecidas en la ciudad gaditana.
«Por último, quiero recordar a los ciudadanos españoles que fueron asesinados en los atentados ocurridos en la localidad gaditana de Algeciras, que acabó con la vida de Diego Valencia Pérez e hirió al sacerdote Antonio Rodríguez», escribe Fernando Grande-Marlaska en el prólogo del informe sobre la actividad terrorista en nuestro país, tal y como informa The Objetive. Del mismo modo, recuerda a otras víctimas como Maya Villalobo o Iván Illarramendi, que murieron «en el ataque cometido por el grupo terrorista Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023 que causó la muerte de más de 1.200 personas».
También destaca el ministro el atentado sufrido por el político Alejo Vidal-Quadras, en noviembre del pasado año, cuando fue alcanzado por una bala que le causó heridas en la cara. En cualquier caso, lo que más llama la atención es el cambio de postura respecto al ataque de Algeciras. Hasta ahora, el área de Grande-Marlaska había evitado vincular el suceso con un ataque islamista. De hecho, desde Interior llegaron a insistir en que Kanjaa no respondía al perfil de yihadista y padecía un trastorno mental.
Juzgado por terrorismo en la Audiencia Nacional
Con esta posición, el Ministerio del Interior se alinea con la postura de la Fiscalía y la Audiencia Nacional, que juzgará a Yasin Kanza por dos delitos de asesinato terrorista, uno de ellos en grado de tentativa y un tercer delito de lesiones terroristas, pese a los retirados intentos de la defensa del acusado porque se le reconocieran los trastornos mentales y así evitar que fuese juzgado por las citados ilícitos. Tanto el juez instructor como el fiscal del caso han dejado claro que Kanza, de origen marroquí, debe ser juzgado por terrorismo yihadista.
«La identidad de las personas agredidas, el lugar de comisión de los hechos, los datos aportados al procedimiento sobre el acceso a páginas de internet y las propias manifestaciones realizadas por el recurrente en su declaración como investigado permitían deducir que el fin pretendido se encuentra entre los enumerados en el artículo 573 del Código Penal y calificar los hechos como delito de terrorismo», señala el representante del Ministerio Público, que pide 50 años de cárcel para Kanjaa. En cualquier caso, recuerda el fiscal, la valoración de la enfermedad mental del presunto yihadista como eximente dependerá del tribunal que juzgue los hechos.
Cadena de ataques en Algeciras
Cabe destacar el plan que llevó a cabo Yassine Kanjaa, que culminó con la muerte de una persona mientras dejó heridas a otros dos. Primero se dirigió a la iglesia de San Isidro e increpó a una primera persona por su religión. Acto seguido, volvió a su casa, apagó el teléfono y cogió un machete de grandes dimensiones para volver a la parroquia. Por el camino, agredió a un vecino y a su llegada a la iglesia, fue directo a por el sacerdote, que oficiaba misa en ese momento. Antonio Rodríguez intento huir, pero finalmente cayó al cuelo y el presunto terrorista le dio un golpe con el cuchillo en la cabeza.
Pese a que se recuperó, el párroco falleció el pasado mes de octubre. La cadena de ataques culminó en la iglesia de Nuestra Señora de Palma donde Kanjaa comenzó a golpear con el machete a su sacristán en el cuello y en la cabeza hasta que acabó con su vida. Después, continuó su trayecto hacia el Mirador del Muro, aunque la Policía Local de Algeciras pudo detenerlo antes, en un momento en que se arrodilló en el suelo. Sobre el presunto yihadista pesaba una orden de expulsión al país alauí seis meses antes de que cometiese el atentado.
303 víctimas españolas
El pasado año, destaca el balance del Centro Memorial de Víctimas del Terrorismo, se cerró con la muerte tres ciudadanos españoles que fueron asesinados en dos atentados, uno ocurrido en la localidad gaditana de Algeciras y los otros dos en el ataque cometido por el grupo Hamas contra Israel. De modo que, «el número de españoles o de extranjeros residentes en España que han perdido la vida como consecuencia de ataques cometidos por grupos de inspiración yihadista, hasta junio de 2024, asciende a 303, incluyendo las otras tres víctimas mortales registradas en otro atentado ocurrido en Afganistán el 18 de mayo de 2024».
Por otro lado, detallan, las operaciones policiales contra el terrorismo yihadista en 2023 superaron la cifra del millar de sospechoso arrestados desde que se cometieron los atentados del 11-M: 1.035. La cifra de arrestos del año pasado (78), no obstante, es la tercera más alta desde 2004, solo superada por los datos del año del 11-M (131 arrestos) y los de 2005 (92 sospechosos capturados). Lo que indica la intensidad, advierten, «de la actividad desarrollada por los cuerpos de seguridad durante 2023, muy por encima de la media del periodo que está en 49 detenciones por año».
Arrestados
De los arrestados, el 58% se movían en la órbita del Estado Islámico, organización a la que habían jurado fidelidad varios de los capturados por la Policía Nacional y la Guardia Civil. Al Qaeda, por otro lado, tenía la adhesión de seis detenidos que suponían el 7,69% del total. Los simpatizantes de Al Qaeda colaboraban, presuntamente, con la milicia Jaysh al Islam que opera en Siria y está vinculada al grupo fundado por Bin Laden.
Destaca, no obstante, la adhesión de algunos detenidos a otra siglas. Uno de los arrestados estaba estaba vinculado al Emirato del Cáucaso y otros quince, todos ellos de nacionalidad paquistaní, al grupo Tehreek-e-Labbaik Pakistán (TLP) que no está declarado formalmente como grupo terrorista, aunque en Francia se vincula a miembros de esta formación con un atentado. Cabe destacar que es el segundo año consecutivo en el que se captura a seguidores de TLP en España. En 2022 fueron seis los arrestados.
Un comentario
Esto parece un chiste de humor negro, casi un año después de que se produjese el atentado terrorista de Algeciras -que así fue denominado muy poco después de que se produjese por diversas fuentes y las evidencias-, nuestro ineficaz ministro Marlaska lo reconoce. Que sirva todo para saber que debemos estar en alerta (sobre todo las autoridades ) – al igual que está el país desde hace ya años en alerta 4 por amenaza terrorista- y nunca más se vuelva a repetir estos lamentables hechos.