La sociedad propietaria de los terrenos de Valdevaqueros, Valdevaqueros Pueblo, S.L., ha presentado este lunes a las instituciones locales y a representantes de organizaciones sociales y ecologistas de Tarifa y de la comarca del Campo de Gibraltar su nuevo proyecto, que aspira a «convertirse en un proyecto de referencia de urbanización ecológica, un ejemplo de urbanismo verde», según explican en una nota de prensa.
El proyecto se asienta sobre una superficie de casi 800.000 metros cuadrados al oeste del término municipal y detrás de la carretera que separa la playa de Valdevaqueros de los terrenos de monte.
En ese espacio en 2012 el Ayuntamiento de Tarifa aprobó un proyecto para construir una macro-urbanización que creó una intensa polémica y que fue anulado por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, al estimar un recurso de Ecologistas en Acción y considerar que era nulo porque no había sido sometido a evaluación de impacto ambiental.
El plan presentado ahora reduce notablemente, en un 90 por ciento, las pretensiones de construir.
Si el plan anterior pretendía construir una macrourbanización con 350 viviendas y 1.400 plazas hoteleras, el nuevo proyecto prevé poner en pie 60 viviendas y 240 plazas hoteleras «que ocuparán tan sólo el 7,6% del terreno disponible», según la nota de prensa.
La propuesta presentada parte de la premisa de que «la playa de Valdevaqueros no se toca». Su uso «se blindará de forma definitiva con una concepción de espacio abierto y público para el disfrute de todos los ciudadanos, un espacio libre de asfalto y protegido al servicio de la comunidad», asegura la nota de prensa.
La edificabilidad se concentrará «en el área más alejada de la costa» y tiene una fecha de entrega prevista en la primavera de 2025.
El proyecto de Montevaqueros, como ha sido bautizado, ocupará 61.000 metros cuadrados, que se repartirán entre los usos residenciales (12.300 metros cuadrados), los usos turísticos (28.700 metros cuadrados) y la zona acotada para aparcamientos (20.000 metros cuadrados).
«El resto, 740.000 metros cuadrados, quedará libre para el uso de los ciudadanos», asegura la nota de prensa sobre el proyecto.
Este espacio de uso público, tendrá 224.000 metros cuadrados de servicios generales de espacios libres, 135.000 para servicios generales de comunicaciones, 45.000 para servicios de interés público y social (SIPS) y 43.000 para la red viaria y peatonal.
El proyecto de Montevaqueros quiere apostar por «el respeto al medio ambiente y la conservación de la naturaleza como sus grandes señas de identidad».
Las construcciones «se abordarán con una perspectiva ecológica», con techos verdes, pastos en lugar de césped, materiales sostenibles e instalaciones para recuperar el agua de la lluvia o para el abastecimiento de energías renovables.
«Las parcelas no contarán con muros para permitir el paso de los animales entre ellas».
Para reducir «al máximo» su impacto visual los equipamientos residenciales serán de una sola planta y los usos turísticos se distribuirán en edificios de dos plantas.
Es un proyecto «radical en su defensa de los valores medioambientales» y «de un urbanismo que respete y conserve uno de los enclaves naturales más hermosos del sur de Europa, frente a las presiones urbanísticas».
El análisis del impacto medioambiental ha sido el punto de partida del diseño urbanístico, «que ha contado con la participación de un equipo de profesionales en los que se han integrado biólogos, ambientalistas y geógrafos».