El ferry Jaime I, que opera la ruta del Estrecho entre Tarifa y los puertos de Marruecos, permanece inmovilizado dentro del muelle desde primeras horas hoy (en estos momentos 11.30 h sigue inmovilizado) , lo que ha generado un nuevo caos en las instalaciones portuarias. Mientras tanto, otro buque de Baleària aguarda fuera del puerto a la espera de entrar y cubrir el servicio.
Centenares de pasajeros que llegaban para embarcar se agolpaban en la terminal sin información clara ni confirmación de billetes, a la espera de que la incidencia se resuelva. Policía Local, Guardia Civil y Bomberos de Tarifa se encuentran en la zona para gestionar la situación y atender a los viajeros afectados, según fuentes oficiales.
La compañía apenas ha ofrecido información fragmentada y escasa a los usuarios, lo que ha alimentado las quejas y la frustración de quienes se encontraban en la terminal durante horas sin respuesta puntual sobre la reanudación de los servicios.
Una larga lista de problemas desde su llegada a Tarifa
Desde que el Jaime I fue asignado a las conexiones del Estrecho, la operativa en Tarifa no ha sido fluida. Los problemas recurrentes con esta embarcación han generado preocupación entre pasajeros, agentes portuarios y responsables municipales:
🔹 Retrasos frecuentes y cambios de última hora
No es la primera vez que el buque sufre paradas imprevistas o modifica sus horarios, dejando a viajeros varados y obligando a Baleària a reorganizar embarques sobre la marcha.
🔹 Averías técnicas y fallos en el sistema de maniobra
El buque ha experimentado incidencias técnicas que han afectado tanto a su salida como a sus operaciones en puerto, obligando a intervenciones urgentes de equipos de la naviera en repetidas ocasiones.
🔹 Problemas en la gestión de pasajeros
Los retrasos y cancelaciones han generado acumulación de viajeros en las terminales sin información clara ni atención suficiente, con quejas sobre la falta de comunicación constante con los usuarios.
🔹 Repercusiones en la conectividad del Estrecho
La ruta Tarifa–Tánger es un enlace clave para residentes, turistas y transporte de mercancías; la irregularidad del Jaime I ha repercutido negativamente en la fiabilidad de esta conexión estratégica.
El problema más grave: emisiones contaminantes y humos negros diarios
Más allá de las incidencias operativas, el Jaime I ha sido objeto de numerosas denuncias vecinales y quejas públicas por la emisión continuada de humos negros y gases contaminantes durante sus maniobras y estancias en el puerto de Tarifa.
Vecinos, colectivos ambientales y trabajadores portuarios han denunciado de forma reiterada:
columnas de humo espeso visibles a diario,
olores fuertes asociados a combustión deficiente,
y episodios prolongados de emisiones mientras el buque permanece atracado.
Estas situaciones han sido documentadas en fotografías, vídeos y registros enviados tanto a la naviera como a distintas administraciones. Sin embargo, la compañía ha guardado silencio público sobre el impacto ambiental del buque, sin ofrecer explicaciones claras ni medidas correctoras conocidas.
Las críticas señalan que el problema no es puntual, sino estructural y sostenido en el tiempo, afectando a la calidad del aire en el entorno portuario y degradando la convivencia con los vecinos de la zona.
La incidencia de hoy vuelve a situar al Jaime I en el centro del debate sobre la fiabilidad del servicio y el respeto al entorno urbano y ambiental de Tarifa, mientras cientos de pasajeros siguen pendientes de una solución inmediata a su viaje.















