A lo largo de más de cuatrocientas páginas, Francisco Núñez Benjumea, que en su día dirigió junto a su padre la famosa ganadería de Núñez del Cuvillo, narra la vida del que pasa por ser uno de los fundadores de la cabaña de bravo andaluza y el creador de la saga más larga de ganaderos de la historia del toreo, la gaditana de los Núñez, de la que el propio autor representa la novena generación.
Núñez Temblador (Jerez de la Frontera, 1735 – Cádiz, 1795) fundó su primera vacada con reses procedentes de Marruecos, concretamente de una agresiva raza bovina criada al sur de la cordillera del Atlas, desde donde importó miles de cabezas para surtir a los colonos adscritos a los planes de repoblación de Andalucía durante el reinado de Carlos III, y de las que aún queda una notable carga genética en la famosa ganadería de Miura.
Pero, como miembro de una importante familia de marinos y militares de la época, Núñez Temblador se muestra también como un hombre de gran ingenio y acusada audacia para hacerse valer a los dos lados del Estrecho de Gibraltar en aquellos tiempos difíciles, desde el maremoto de Cádiz, consecuencia del famoso terremoto de Lisboa, hasta los años previos a la Guerra de la Independencia.
En esa labor de naviero y comerciante a gran escala basa su descendiente la descripción que hace no solo de la intensa vida del personaje sino también de todos los hechos y datos reales que se entrelazan en su trayectoria y que se vivieron en España durante el convulso Siglo de las Luces, en el final del Antiguo Régimen y la llegada de la Ilustración.
Así, durante el relato aparecen en escena figuras como el marqués de la Ensenada o los militares Blas de Lezo y Bernardo de Gálvez, entre otros muchos nombres que resultaron decisivos durante ese siglo en el que la decadencia de los valores del Antiguo Régimen generó cambios radicales en medio mundo.
Del mismo modo, la obra hace especial hincapié en la evolución de la tauromaquia, en tanto que durante estos años, una vez que la casa de Austria desdeñó el toreo caballeresco, se produjo el gran florecimiento del toreo a pie, en cuya evolución fueron decisivos personajes como Pedro Romero, Jerónimo José Cándido o Pepe-hillo, que también aparecen en el relato.
Francisco Núñez Benjumea, que además de ganadero de bravo y gran aficionado a la navegación -«hombre de mar y de campo», se define- es licenciado en Ciencias Económicas por la Universidad de Boston, destina a las Hermanitas de la Cruz todos los beneficios de esta novela, tercera de las obras que, sobre una temática similar, ya lleva publicadas.