IAM/Redacción En la tarde de ayer, se llevaron, entre otras, las quejas transmitidas por los comerciantes del casco antiguo en cuanto a la instalación del mercado hebreo, que en estos días ha estado en La Alameda, donde el propio concejal de festejos, Daniel Rodríguez, reconoció ante la pregunta formulada por la portavoz María Gallardo que el empresario adjudicatario no había pagado nada, ya que este mercado se encuadraba dentro de una serie de actividades programadas en «Caprichos de Cuaresma».
A lo largo de la sesión, se remarcó la competencia desleal que supone esto hacia los empresarios tarifeños que sí pagan sus impuestos durante todo el año.Además, se trasladó la gran preocupación manifiesta por los propietarios de los negocios, especialmente los de La Calzada y la C/ Guzmán el Bueno, quienes ven cómo las calles se abren y/o cierran al tráfico rodado sin argumentación ni razonamiento alguno por parte del equipo de gobierno.Son muchos los empresarios que llevan tiempo poniéndose en contacto con la agrupación local, y han manifestado a su portavoz que «de seguir así, tendremos que cerrar nuestros negocios y trasladarnos a otro sitio porque las pérdidas en ingresos nos hace insostenible el mantenimiento de un local con lo que ello conlleva en unos meses, que ya de por sí, son muy duros», apuntaba uno de los propietarios.Otros, ven incoherente el hecho de que los fines de semana en temporada baja, se prohíba el acceso de vehículos de tal manera que no se puede acceder a estos sitios. Se da la circunstancia de que hay una farmacia que a veces está de guardia y no se puede acceder a ella en vehículo, algo totalmente incomprensible ante un caso de emergencia o de enfermedad. Todo esto fue trasladado por Gallardo en el punto que llevaron a debate sobre la normativa de terrazas-veladores, a la cual se opuso el PP tanto en cuanto el gobierno no tome cartas en el asunto y tome en serio los problemas manifestados por los ciudadanos.En este punto, el señor Terán fue bastante vehemente, intentando vender unas ordenanzas como nuevas, cuando estas ya existían y donde se congratulaban enormemente de que las mesas y las sillas a partir de ahora estarán recogidas. Desde el Partido Popular, añade González Gallardo, se seguirán reuniendo en los próximos días con los perjudicados, para continuar dándole forma a posibles actuaciones, ya que según afirma «estamos cansados de que nos tomen el pelo y queremos ser la voz de nuestros vecinos. No están solos. Tienen todo nuestro apoyo», y ahora ademas saben sin dudas que el tripartito se ha convertido en un lastre para el desarrollo economico de nuestros empresas.