IAM/ http://unodaquialgeciras.blogspot.com.es/ Antes de entrar en materia, no me negaran que el titular se las trae por lo llamativo y las sensaciones y recuerdos que despierta, sobre todo para los de generación ya que por tener tiene hasta su mijita de morbo, por mucho que se limita a recoger la noticia de que el alcalde de La Línea, va a traspasar la verja para unirse a la romería de políticos y sindicalistas que han viajado a Gibraltar para estrechar la mano de Picardo (hay cola para hacerse una foto con el nieto de la española ) y reunirse con el mandamás de la Roca o asistir a eventos organizados en el Peñón.
Picardo que se deja querer, aunque él tampoco le hace ascos a cruzar la verja y asistir a foro a este lado de la Verja, y por venir ha venido hasta reunirse con el alcalde de San Roque «la ciudad donde reside la de Gibraltar». Ocurre que desde que los gibraltareños apostaron otra vez en las urnas por Picardo renobándole de forma rotunda su mandato, lo que ha coincidido prácticamente con lo crudo que se lo han puesto los españoles en las urnas a Rajoy para que siga gobernando, algo se está moviendo con relación a las relaciones entre Gibraltar y nuestra Comarca, lo que no es que sea bueno sino que es mejor, sobre todo si las reuniones plenas de buenas intenciones fraguan en proyectos positivos para ambas partes.
Algo se está moviendo, repetimos en las relaciones entre un lado y otro de la Verja, no sólo en lo relativo a la buena vecindad entre dos pueblos que están condenados a entenderse, sino ben el ámbito de la colaboración y la búsqueda de proyectos que beneficien a ambas partes, por mucho que las reivindicaciones sobre la soberanía permanezcan tan inamovibles y fijas como los bloques de hormigón de ls que ya nadie se acuerdan. A esperar y desear tocan que no decaiga la batería, eso si sin echar las campanas al vuelo, deseando que no haya una vuelta atrás por encontronazos diplomáticos sobre todo en las aguas en litigio.