Palabras de AMOR en lunes. Por María Eugenia Manzano

La oscuridad no puede expulsar a la oscuridad: sólo la luz puede hacer eso.
El odio no puede expulsar al odio: sólo el amor puede hacer eso.
(Martin Luther King)
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Por primera vez en mi vida, hago cola para comprar un helado. Delante de mí, una niña apoyada sobre el hombro de su abuela no me deja de mirar. Cuando les llega el turno, baja de un salto, señala con el dedo «chocolate con almendras» y con el cucurucho en mano, el resto de este planeta, incluidas su abuela y yo, ha pasado a otro lugar. Es la espontaneidad que deseo. Mirar con insolencia y sin miedo y comer el helado que elijo sin que nada más me importe.
Otro día más que no alcanzo a ver la puesta de sol.
-No te preocupes, mi amor. Llegamos a la salida de luna.
Es el enfoque que quiero.
La columna de humo ennegrece y se alza con fuerza en el cielo, pero la difumina enseguida el atardecer del Estrecho. ¡Ay, miniñita, mimadre, me duele contigo, lo entiendo!
El verdemiel de tus ojos puede con todos los fuegos, azules, morados o negros, y el salvavidas de tu boca con cualquier desbordamiento.
Esa mirada tuya.
Es la única que quiero.
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A mi hijo Manuel.
And Still I Rise 
(Y aún así, me levanto)
Poema de Maya Angelou
«Tú puedes escribirme en la historia
con tus amargas, torcidas mentiras,
puedes aventarme al fango
y aún así, como el polvo…
me levanto.
¿Mi descaro te molesta?
¿Porqué estás ahí quieto, apesadumbrado?
Porque camino
como si fuera dueña de pozos petroleros
bombeando en la sala de mi casa…
Como lunas y como soles,
con la certeza de las mareas,
como las esperanzas brincando alto,
así… yo me levanto.
¿Me quieres ver destrozada?
cabeza agachada y ojos bajos,
hombros caídos como lágrimas,
debilitados por mi llanto desconsolado.
¿Mi arrogancia te ofende?
No lo tomes tan a pecho,
Porque yo río como si tuviera minas de oro
excavándose en el mismo patio de mi casa.
Puedes dispararme con tus palabras,
puedes herirme con tus ojos,
puedes matarme con tu odio,
y aún así, como el aire, me levanto.
¿Mi sensualidad te molesta?
¿Surge como una sorpresa
que yo baile como si tuviera diamantes
ahí, donde se encuentran mis muslos?
De las barracas de vergüenza de la historia
yo me levanto
desde el pasado enraizado en dolor
yo me levanto
soy un negro océano, amplio e inquieto,
manando
me extiendo, sobre la marea,
dejando atrás
noches de temor, de terror,
me levanto,
a un amanecer maravillosamente claro,
me levanto,
brindado los regalos legados por mis ancestros.
Yo soy el sueño y la esperanza del esclavo.
Me levanto.
Me levanto.
Me levanto.»