Una embarcación de recreo estaba paseando por el Estrecho de Gibraltar, cuando se detuvieron por el ajetreo de las gaviotas y vieron que estaban atacando a un pájaro, así que lo primero que hicieron fue alejar las gaviotas salvándolo e introducirlo en el barco con un salabar.
El pájaro, que es una águila calzada, estaba asustada y sin fuerzas para moverse, además de ser una especie conocida por las migraciones entre África y Centro Europa, que está en peligro de extinción. El ciudadano no dudó en llamar rápidamente a la Guardia Civil, a la comandancia, y al 112… Para que le dieran una solución o al menos pudieran hacerse a cargo del águila; pero no hubo un servicio rápido por circunstancias de ser domingo y próximo a cambio de turno, así que decidieron llevarla hasta el Club Náutico Saladillo de Algeciras, donde esta persona tiene su embarcación y después de hablar con algunos socios de dicha asociación, finalmente se la pudieron llevar al CEDEFO Los Barrios, donde se harían cargo del ave, para que se recupere con el objetivo de que así pueda volver a alzar el vuelo.